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lunes, 23 de septiembre de 2013

La Herradura II - Costa Tropical de Granada

Hoy voy con La Herradura pueblo, su parte antigua, alta, donde desde abajo y en perspectiva crees imposible llegar. Donde según vas subiendo, te falta el aliento y tus gemelos te hacen señas y sólo de pensar en bajar lo que has subido se te ponen los pelos como escarpias. Pero una vez arriba, recuperado el ritmo cardíaco, no cabe la menor duda de que ha merecido la pena el esfuerzo. Las vistas son espectaculares y sus gentes, una vez más, increíblemente entrañables, hospitalarias y afectuosas. Comenzamos por la parte llana para ir subiendo...


Rincones como este, a mí, particularmente, me cautivan...

La Iglesia, a la que nunca he podido entrar por encotrarse cerrada las veces que por allí he pasado

Nada mejor que esta escalinata, para hacer piernas

En memoria del naufragio de la Armada Española en la Bahía de La Herradura, en Octubre de 1562

El campanario

Coquetas plazuelas, como esta de San José, donde hoy se encuentra este busto en homenaje a un querido vecino del del pueblo:

"Pepe Gámez ha sido un artista humilde y un pilar fundamental dentro de la parroquia y la comunidad cristiana. Este busto es un homenaje en recuerdo a su memoria, trabajo y dedicación al pueblo de La Herradura y la parroquia de San José. Este es un homenaje, sin ningún color político, sino de todo el pueblo de La Herradura a José Parra Gámez"

 Esa misma plaza, hace dos años, algo más "salvaje" y con otra escultura, que a mí particularmente, me gustaba mucho... Me gustaría saber a qué parte del pueblo la han trasladado


Y comenzamos a subir...





A estas imágenes podría añadirles el olor a puchero que impregnaba mi lenta ascensión, ¡¡qué rico!! Hubiera dado cualquier cosa por colarme en alguna casa y oler directamente de la olla, ufff...


La placidez de la que os hablaba. Con reloj, pero sin prisa, esta señora, absolutamente ajena a mi presencia, con sus "converse" de moda, barría su puerta y quitaba las flores secas de su ventana. En ese momento no había nada más importante. 


Cuando la respiración te va faltando, de pronto encuentras un rincón como este, que parece estar esperándote, donde descansé un poquillo antes de continuar la ascensión... Coqueto ¿verdad?


No me pregunteis porqué, pero esta foto ¡me encanta!



No os canso más, continuaré con más entregas hasta llegar "a la cima"...

2 comentarios:

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